viernes, 29 de diciembre de 2017

Comentario CIC al YouCat. Pregunta n. 242



YOUCAT Pregunta n. - 242 – Parte I. ¿Por qué debe la Iglesia preocuparse especialmente de los enfermos?


(Respuesta YouCat) Jesús nos enseña que el cielo sufre cuando nosotros sufrimos. Dios quiere ser reconocido incluso en «uno de estos mis hermanos más pequeños» (Mt 25,40). Por eso Jesús ha establecido el cuidado de los enfermos como tarea central para sus discípulos. Los exhorta: «Curad enfermos » (Mt 10,8), y les promete el poder divino: «Echarán demonios en mi nombre... impondrán las manos a los enfermos, y quedarán sanos» (Me 16,17-18).    

Reflecciones y puntos a profundizar  (Comentario CIC) (C.I.C 1506) Cristo invita a sus discípulos a seguirle tomando a su vez su cruz (cf. Mt 10,38). Siguiéndole adquieren una nueva visión sobre la enfermedad y sobre los enfermos. Jesús los asocia a su vida pobre y humilde. Les hace participar de su ministerio de compasión y de curación: "Y, yéndose de allí, predicaron que se convirtieran; expulsaban a muchos demonios, y ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban" (Mc 6,12-13). (C.I.C 1507) El Señor resucitado renueva este envío ("En mi nombre [...] impondrán las manos sobre los enfermos y se pondrán bien"; Mc 16,17-18) y lo confirma con los signos que la Iglesia realiza invocando su nombre (cf. Hch 9,34; 14,3). Estos signos manifiestan de una manera especial que Jesús es verdaderamente "Dios que salva" (cf. Mt 1,21; Hch 4,12).  


Para meditar
(Comentario YouCat) Uno de los rasgos determinantes del cristianismo ha sido siempre que los ancianos, los enfermos y los necesitados de cuidados estén en el centro. Madre Teresa, que cuidó de los moribundos en los suburbios de Calcuta, es sólo una persona en una larga cadena de cristianos y cristianas que encontraron a Cristo precisamente en aquellos que eran excluidos y evitados por los demás. Cuando los cristianos son verdaderamente cristianos, brota de ellos un efecto curativo. Algunos reciben incluso el don de curar corporalmente en la fuerza del Espíritu Santo (carisma de la sanación (carismas).

(Comentario CIC)  (C.I.C 1508) El Espíritu Santo da a algunos un carisma especial de curación (cf. 1Co 12,9. 28. 30) para manifestar la fuerza de la gracia del Resucitado. Sin embargo, ni siquiera las oraciones más fervorosas obtienen la curación de todas las enfermedades. Así San Pablo aprende del Señor que "mi gracia te basta, que mi fuerza se muestra perfecta en la flaqueza" (2Co 12,9), y que los sufrimientos que tengo que padecer, tienen como sentido lo siguiente: "Completo en mi carne lo que falta a las tribulaciones de Cristo, en favor de su Cuerpo, que es la Iglesia" (Col 1,24).

(Continua la Pregunta: ¿Por qué debe la Iglesia preocuparse especialmente de los enfermos?) 

No hay comentarios: