domingo, 30 de junio de 2019
Comentario CIC al YouCat. Pregunta n. 513.
(Respuesta YouCat) El Padrenuestro consiste
en siete peticiones al Padre misericordioso del cielo. Las tres primeras
peticiones se refieren a Dios y a cómo debemos servirle. Las últimas cuatro
peticiones llevan nuestras necesidades humanas fundamentales ante nuestro Padre
del cielo.
Reflecciones y puntos a profundizar (Comentario CIC) (C.I.C 2803) Después de habernos puesto en
presencia de Dios nuestro Padre para adorarle, amarle y bendecirle, el Espíritu
filial hace surgir de nuestros corazones siete peticiones, siete bendiciones.
Las tres primeras, más teologales, nos atraen hacia la Gloria del Padre; las
cuatro últimas, como caminos hacia Él, ofrecen
nuestra miseria a su Gracia. "Abismo que llama al abismo" (Sal
42, 8).
Para meditar
(Comentario CIC) (C.I.C
2804) El primer grupo de peticiones nos lleva hacia Él,
para Él: ¡tu
Nombre, tu Reino, tu Voluntad! Lo propio del amor es
pensar primeramente en Aquél que amamos. En cada una de estas tres peticiones,
nosotros no "nos" nombramos, sino que lo que nos mueve es "el
deseo ardiente", "el ansia" del Hijo amado, por la Gloria de su
Padre (cf. Lc 22, 14; 12, 50): "Santificado sea [...] venga [...] hágase
[...]": estas tres súplicas ya han sido escuchadas en el Sacrificio de
Cristo Salvador, pero ahora están orientadas, en la esperanza, hacia su
cumplimiento final mientras Dios no sea todavía todo en todos (cf. 1Co 15, 28).
sábado, 29 de junio de 2019
Comentario CIC al YouCat. Pregunta n. 512.
YOUCAT Pregunta n. 512. - ¿Cómo surgió el Padrenuestro?
(Respuesta YouCat) El Padrenuestro surgió
por la petición de un discípulo de Jesús, que veía orar a su Maestro y quería
aprender del mismo Jesús cómo se ora bien.
Reflecciones y puntos a profundizar (Comentario CIC) (C.I.C 2759) "Estando él [Jesús] en
cierto lugar, cuando terminó, le dijo uno de sus discípulos: 'Maestro,
enséñanos a orar, como enseñó Juan a sus discípulos.'" (Lc 11, 1). En
respuesta a esta petición, el Señor confía a sus discípulos y a su Iglesia la oración
cristiana fundamental. San Lucas da de ella un texto breve (con cinco
peticiones: cf. Lc 11, 2-4), San Mateo una versión más desarrollada (con siete
peticiones: cf. Mt 6, 9-13). La tradición litúrgica de la Iglesia ha conservado
el texto de San Mateo: Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu
Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el
cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas como también
nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y
líbranos del mal.
Para meditar
(Comentario CIC) (C.I.C
2760) Muy pronto, la práctica litúrgica concluyó la oración del Señor con una
doxología. En la Didaché (8, 2) se
afirma: "Tuyo es el poder y la gloria por siempre". Las Constituciones apostólicas (7, 24, 1)
añaden en el comienzo: "el reino"': y ésta la fórmula actual para la
oración ecuménica. La tradición bizantina añade después un gloria al
"Padre, Hijo y Espíritu Santo". El misal romano desarrolla la última
petición (Cf. Rito de la Comunión,
Embolismo) en la perspectiva explícita de "mientras esperamos (Tt 2, 13)
la gloriosa venida de nuestro Salvador Jesucristo"; después se hace la
aclamación de la asamblea, volviendo a tomar la doxología de las Constituciones
apostólicas.
(Siguiente Pregunta: ¿Qué estructura tiene el Padrenuestro?)
viernes, 28 de junio de 2019
Comentario CIC al YouCat. Pregunta n. 511.
YOUCAT Pregunta n. 511. - ¿Qué dice el Padrenuestro?
Padre
nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu
reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan
de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los
que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Tuyo es
el reino, tuyo el poder y la gloria por siempre, Señor.
En latín:
Pater
noster, qui es in caelis; sanctificetur nomen tuum; adveniat regnum tuum, fiat
voluntas tua, sicut in cáelo et in térra, Panem nostrum quotidianum da nobis
hodie; et dimitte nobis debita nostra, sicut et nos dimittimus debitoribus
nostris; et ne nos inducas in tentationem; sed libera nos a malo. Qui a
tuum est regnum, et potestas, et gloria in saecula. Amen.
(Comentario YouCat) El Padrenuestro es la única
oración que Jesús mismo enseñó a sus discípulos (Mt 6,9-13; Le 11,2-4). Por eso
el Padrenuestro se llama también «la oración del Señor». Cristianos de todas
las confesiones la rezan a diario, tanto en las celebraciones litúrgicas como
en privado. El añadido «Tuyo es el reino...» se menciona ya en las
Constituciones apostólicas (Didaché, que data de alrededor del año 150 d.C.) y
se puede añadir al Padrenuestro.
(Siguiente Pregunta: ¿Cómo surgió el Padrenuestro?)
jueves, 27 de junio de 2019
Comentario CIC al YouCat. Pregunta n. 510.
YOUCAT Pregunta n. 510. - Parte II. ¿Es posible orar siempre?
(Respuesta YouCat – repeticion) Orar es
siempre posible. Orar es una necesidad vital. La oración y la vida son
inseparables.
Reflecciones y puntos a profundizar (Comentario CIC) (C.I.C 2744) Orar es una necesidad vital: si no nos dejamos
llevar por el Espíritu caemos en la esclavitud del pecado (cf. Ga 5, 16-25).
¿Cómo puede el Espíritu Santo ser "vida nuestra", si nuestro corazón
está lejos de él? “Nada vale como la oración: hace posible lo que es imposible,
fácil lo que es difícil […]. Es imposible […] que el hombre […] que ora […]
pueda pecar” (San Juan Crisóstomo, De
Anna, sermón 4, 5: PG 54, 666). “Quien ora se salva ciertamente, quien no
ora se condena ciertamente” (San Alfonso María de Ligorio, Del gran mezzo della preghiera, pars 1, c. 1). (C.I.C 2757)
"Orad continuamente" (1Ts 5, 17). Orar es siempre posible. Es incluso
una necesidad vital. Oración y vida cristiana son inseparables.
Para meditar
(Comentario
YouCat) No se puede despachar a Dios con un par de palabras por la mañana o por
la tarde. Nuestra vida debe convertirse en oración, y nuestras oraciones deben
hacerse vida. La historia de cada vida cristiana es también una historia de
oración, un único y largo intento de unirse cada vez más íntimamente con Dios.
Como en muchos cristianos está vivo el deseo de estar siempre junto a Dios en
su corazón, recurren a la llamada «oración de Jesús», que es una costumbre
antigua especialmente en las iglesias
orientales. El orante intenta integrar una fórmula sencilla de oración —la más
conocida es «Jesús, Hijo de Dios, ten misericordia de mí»— de tal modo en su
jornada, que se convierte en una oración constante.
(Comentario CIC) (C.I.C
2745) Oración y vida cristiana son inseparables porque se trata del mismo
amor y de la misma renuncia que procede del amor. La misma conformidad filial y
amorosa al designio de amor del Padre. La misma unión transformante en el
Espíritu Santo que nos conforma cada vez más con Cristo Jesús. El mismo amor a
todos los hombres, ese amor con el cual Jesús nos ha amado. "Todo lo que
pidáis al Padre en mi Nombre os lo concederá. Lo que os mando es que os améis
los unos a los otros" (Jn 15, 16-17). “Ora continuamente el que une la
oración a las obras y las obras a la oración. Sólo así podemos podemos cumplir
el mandato: ‘Orad constantemente’” (Orígenes, De oratione, 12, 2: PG 11, 452).
(Siguiente Pregunta: ¿Qué dice el Padrenuestro?)
miércoles, 26 de junio de 2019
Comentario CIC al YouCat. Pregunta n. 510.
YOUCAT Pregunta n. 510. - Parte I. ¿Es posible orar siempre?
(Respuesta YouCat) Orar es siempre posible.
Orar es una necesidad vital. La oración y la vida son inseparables.
Reflecciones y puntos a profundizar (Comentario CIC) (C.I.C 2742) "Orad
constantemente" (1Ts 5, 17), "dando gracias continuamente y por todo
a Dios Padre, en nombre de Nuestro Señor Jesucristo" (Ef 5, 20),
"siempre en oración y suplica, orando en toda ocasión en el Espíritu,
velando juntos con perseverancia e intercediendo por todos los santos" (Ef
6, 18)."No nos ha sido prescrito trabajar, vigilar y ayunar
constantemente; pero sí tenemos una ley que nos manda orar sin cesar"
(Evagrio Pontico, Capita practica ad
Anatolium, 49: PG 40, 1245). Este ardor incansable no puede venir más que
del amor. Contra nuestra inercia y nuestra pereza, el combate de la oración es
el del amor humilde, confiado y
perseverante. Este amor abre nuestros corazones a tres evidencias de fe,
luminosas y vivificantes:
Para meditar
(Comentario
YouCat) No se puede despachar a Dios con un par de palabras por la mañana o por
la tarde. Nuestra vida debe convertirse en oración, y nuestras oraciones deben
hacerse vida. La historia de cada vida cristiana es también una historia de
oración, un único y largo intento de unirse cada vez más íntimamente con Dios.
Como en muchos cristianos está vivo el deseo de estar siempre junto a Dios en
su corazón, recurren a la llamada «oración de Jesús», que es una costumbre
antigua especialmente en las iglesias
orientales. El orante intenta integrar una fórmula sencilla de oración —la más
conocida es «Jesús, Hijo de Dios, ten misericordia de mí»— de tal modo en su
jornada, que se convierte en una oración constante.
(Comentario CIC) (C.I.C
2757) "Orad continuamente" (1Ts 5, 17). Orar es siempre posible. Es
incluso una necesidad vital. Oración y vida cristiana son inseparables. (C.I.C
2743) Orar es siempre posible: El
tiempo del cristiano es el de Cristo resucitado que está con nosotros, “todos
los días” (Mt 28, 20), cualesquiera que sean las tempestades (cf. Lc 8, 24).
Nuestro tiempo está en las manos de Dios: “Conviene que el hombre ore
atentamente, bien estando en la plaza o mientras da un paseo: igualmente el que
está sentado ante su mesa de trabajo o el que dedica su tiempo as otras
labores, que levante su alma a Dios: conviene también que el siervo alborotador
o que anda yendo de un lado para otro, o el que se encuentra sirviendo en la
cocina […], intenden elevar la súplica desde lo más hondo de su corazón” (San
Juan Crisóstomo, De Anna, sermón 4,
6: PG 54, 668).
(Continua la Pregunta: ¿Es posible orar siempre?)
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