YOUCAT Pregunta n. 481. - ¿Cómo
se reza el rosario?
(Respuesta YouCat) En cada país o cultura
hay ciertas adaptaciones, que pueden variar ligeramente, con jaculatorias y
otros incisos, como añadir en cada Avemaria, detrás del nombre de Jesús, el
misterio que se contempla. La estructura fundamental es:
(1) En
nombre del Padre y del Hijo... (2) Credo
(profesión de la fe) u otra oración («Señor mío Jesucristo»). (3) Padrenuestro.
(4) Tres Avemarias (con las que se pueden pedir las tres virtudes teologales de
la fe, la esperanza y la caridad; o
invocar a María como hija del Padre, Madre del Hijo y esposa del
Espíritu Santo). (5) Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como era en
un principio, ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén. (6) Cinco
decenas formadas por un Padrenuestro seguido de diez Avemarias y un Gloria.
Se contemplan los misterios gozosos,
luminosos, dolorosos y gloriosos.
Misterios gozosos (lunes y sábado):
1. La Encarnación del Hijo de Dios. 2. La Visitación de Nuestra Señora a su
prima santa Isabel. 3. El Nacimiento del Hijo de Dios en Belén. 4. La
Presentación de Jesús en el templo de Jerusalén. 5. El Niño Jesús perdido y
hallado en el templo.
Misterios luminosos (jueves): 1. El Bautismo de Jesús en
el Jordán. 2. La autorrevelación de Jesús en las bodas de Cana. 3. El anuncio
del Reino de Dios invitando a la conversión. 4. La Transfiguración. 5. La
Institución de la Eucaristía.
Misterios dolorosos (martes y viernes)
1. La Oración de Jesús en el Huerto. 2. La Flagelación del Señor. 3. La Coronación
de espinas. 4. Jesús con la cruz a cuestas camino del Calvario. 5. La
Crucifixión y Muerte de Nuestro Señor.
Misterios gloriosos (miércoles y domingo): 1.
La Resurrección del Hijo de Dios. 2. La Ascensión del Señor a los cielos. 3. La
venida del Espíritu Santo sobre los apóstoles. 4. La Asunción de Nuestra Señora
a los cielos. 5. La Coronación de la Santísima Virgen como Reina de cielos y
tierra.
Reflecciones y puntos a profundizar (Comentario CIC) (C.I.C 2674) Desde el sí dado por la fe en
la anunciación y mantenido sin vacilar al pie de la cruz, la maternidad de
María se extiende desde entonces a los hermanos y a las hermanas de su Hijo,
"que son peregrinos todavía y que están ante los peligros y las
miserias" (Lumen gentium, 62).
Jesús, el único Mediador, es el Camino de nuestra oración; María, su Madre y
nuestra Madre es pura transparencia de Él: María "muestra el Camino"
[Odighitria], es su
"signo", según la iconografía tradicional de Oriente y
Occidente.
Para meditar
(Comentario CIC) (C.I.C
2675) A partir de esta cooperación singular de María a la acción del Espíritu
Santo, las Iglesias han desarrollado la oración a la santa Madre de Dios,
centrándola sobre la persona de Cristo manifestada en sus misterios. En los
innumerables himnos y antífonas que expresan esta oración, se alternan
habitualmente dos movimientos: uno "engrandece" al Señor por las
"maravillas" que ha hecho en su humilde esclava, y por medio de ella,
en todos los seres humanos (cf. Lc 1, 46-55); el segundo confía a la Madre de
Jesús las súplicas y alabanzas de los hijos de Dios ya que ella conoce ahora la
humanidad que en ella ha sido desposada por el Hijo de Dios.
(Siguiente
Pregunta: ¿Qué importancia tenía la oración entre los primeros cristianos?)
No hay comentarios:
Publicar un comentario