lunes, 13 de agosto de 2018

Comentario CIC al YouCat Pregunta n. 344.


YOUCAT Pregunta n. 344. – Parte II. ¿Por qué se pronuncia en realidad la Iglesia también acerca de cuestiones éticas pertenecientes a la vida personal?    


(Respuesta YouCat – repeticion) La fe es un camino. Cómo se mantiene uno en este camino, es decir, cómo se vive de forma justa y buena, no siempre se deduce de las indicaciones del Evangelio. El Magisterio de la Iglesia también debe recordar a los hombres las exigencias de la ley moral natural.    

Reflecciones y puntos a profundizar (Comentario CIC) (C.I.C 2034) El Romano Pontífice y los obispos como ‘maestros auténticos por estar dotados de la autoridad de Cristo [...] predican al pueblo que tienen confiado la fe que hay que creer y que hay que llevar a la práctica’ (Lumen gentium, 25). El magisterio ordinario y universal del Papa y de los obispos en comunión con él enseña a los fieles la verdad que han de creer, la caridad que han de practicar, la bienaventuranza que han de esperar.    

Para meditar    

(Comentario YouCat) No hay una doble verdad. Lo que es correcto desde el punto de vista humano, no puede serfalso desde el punto de vista cristiano. Y lo que es correcto para el cristiano no puede ser falso humanamente. Por eso la Iglesia debe pronunciarse acerca de todas las cuestiones morales.     

(Comentario CIC) (C.I.C 2035) El grado supremo de la participación en la autoridad de Cristo está asegurado por el carisma de la infalibilidad. Esta “se extiende a todo el depósito de la revelación divina” (Lumen gentium, 25); se extiende también a todos los elementos de doctrina, comprendida la moral, sin los cuales las verdades salvíficas de la fe no pueden ser salvaguardadas, expuestas u observadas (Cf. Mysterium ecclesiae, 3). (C.I.C 2035) El grado supremo de la participación en la autoridad de Cristo está asegurado por el carisma de la infalibilidad. Esta “se extiende a todo el depósito de la revelación divina” (Lumen gentium, 25); se extiende también a todos los elementos de doctrina, comprendida la moral, sin los cuales las verdades salvíficas de la fe no pueden ser salvaguardadas, expuestas u observadas (Cf. Mysterium ecclesiae, 3).       

(Continua la Pregunta: ¿Por qué se pronuncia en realidad la Iglesia también acerca de cuestiones éticas pertenecientes a la vida personal?)   

No hay comentarios: